La activista de Caminando Fronteras, Helena Maleno, ha sufrido amenazas de muerte.
16 de agosto de 2017.- En los últimos meses se han agudizado las amenazas que vienen
sufriendo defensoras de Derechos Humanos y activistas que llevan tiempo trabajando y
denunciando la situación en la Frontera Sur.
Criminalizar la solidaridad se está convirtiendo en un patrón de conducta que pretende
deslegitimar la solidaridad entre las personas y los pueblos. Es algo que pudimos comprobar en
la Caravana Abriendo Fronteras a la Frontera Sur el pasado mes de julio.
Frente a las últimas amenazas dirigidas a mujeres activistas del colectivo Caminando Fronteras,
concretamente a Helena Maleno, queremos denunciar que:
1. Si activistas y defensoras de DDHH que nos encontramos en una situación privilegiada
estamos recibiendo este tipo de amenazas, nos preguntamos qué tipo de amenazas
estarán recibiendo las personas migrantes en la Frontera Sur.
2. Cuando los ataques se dirigen a mujeres las amenazas se concretan hacia sus cuerpos
y sus familias. Esto se debe al hecho de ser mujeres, lo cual obedece a patrones
machistas.
3. Denunciamos que el Sindicato Unificado de Policía, cuerpo dirigido a garantizar la
seguridad de las personas, haya participado en una cadena de mensajes que incitan al
odio y a las agresiones sobre las mujeres, así como al odio racista por otro.

Desde Caravana Abriendo Fronteras creemos en la solidaridad como respuesta y estamos
dispuestas a seguir desobedeciendo leyes injustas para obedecer a los Derechos Humanos sin
aceptar ningún tipo de presión y de amenaza y seguiremos manifestando nuestro apoyo
incondicional a quienes se deslegitima y criminaliza por defender la dignidad de las personas y
su libertad de movimiento. Porque creemos firmemente que con nuestra solidaridad
romperemos las vallas de la vergüenza.

Enlace al Comunicado de Caminando Fronteras (al que caravana se suma) #DefenderAQuienDefiende